Uno de los principales ejes para que la empresa crezca y tenga éxito es la productividad de sus trabajadores. Muchas veces, la productividad laboral va ligada al buen o mal mobiliario de oficina. Hay empresas que no ven el mobiliario como un elemento fundamental que afecte, directamente, a la productividad de sus empleados, pero están equivocadas. Las mesas, los asientos, la decoración… Todo influye en el equipo de trabajo, su estado de ánimo e incluso su relación con los clientes y los compañeros.
Si al buen mobiliario de oficina se le suma un horario laboral con sus respectivos descansos y un ambiente comunicativo y motivador, sin duda los trabajadores serán mucho más productivos que si cuentan con condiciones negativas y que no motivan a trabajar. En Collectivity te traemos este artículo donde explicamos el impacto del mobiliario en la productividad laboral.
Un buen mobiliario aumenta la productividad en el trabajo
El mobiliario tiene que ir ligado a la ergonomía y la comodidad, si no, olvídate de él y busca otro que sí cumpla con estas dos características fundamentales. ¿Por qué estas características y no otras? Porque ambas ofrecen al empleado unas condiciones óptimas para poder realizar su jornada laboral sin dolores de espalda, malas posturas o incomodidad.
A día de hoy, las tendencias de diseño apuestan por los espacios abiertos donde los trabajadores tienen más movimiento. Esto lo que transmite es sensación de libertad, una libertad que va ligada a la felicidad y a contar con un estado de ánimo más alegre y motivado.
¿Cómo tiene que ser el mobiliario de oficina ergonómico?
Un mobiliario ergonómico es aquel que está pensado para adaptarse a las necesidades de la persona. Existen diferentes tipos de mobiliario según la tarea, por lo que es importante que, antes de optar por uno, se conozcan las funciones a realizar. Por ejemplo, no es lo mismo una silla ergonómica para una escuela que para una oficina.
Centrándonos en la oficina, existen diferentes espacios: salas de reuniones, salas de entrevistas, salas de descanso, etc. Lo ideal es que para cada una de ellas, haya un mobiliario ergonómico específico. Hay que buscar que los elementos que haya en el espacio afecten positivamente a las personas.
Consejos para elegir un buen mobiliario de oficina
Aunque el mobiliario ergonómico de oficina pueda resultar algo caro, a la larga, será una gran inversión. El bienestar y la productividad van de la mano y, para que sea posible, tienes que tener en cuenta lo siguiente a la hora de comprar mobiliario de oficina:
- Calidad y no cantidad: importa más un mobiliario con materiales y estructura de calidad a contar con mucho mobiliario pero de baja calidad. Busca mobiliario con una vida útil larga.
- Ergonomía: la comodidad es de las principales cosas que se valoran, ya que afecta directamente al estado de ánimo de la persona. Elige mobiliario ergonómico y ajustado a las necesidades de cada persona.
- Fácil de limpiar: por una oficina pasa cantidad de gente a diario, por lo que se acumula suciedad. Elige un mobiliario que pueda limpiarse todos los días sin dificultad y aun así no pierda su brillo.
Importancia de la salud y el mobiliario en la productividad laboral
No hay que olvidar que tanto lo bueno como lo malo afecta a la salud. Las oficinas que cuentan con mobiliario ergonómico y adaptado a las necesidades de sus trabajadores, aumentarán su crecimiento y productividad.
Si los trabajadores comienzan a tener problemas de salud por culpa de un mobiliario incómodo e inadecuado a sus funciones, disminuirá la motivación y, como consecuencia, también la productividad. Te sorprendería saber la cantidad de padecimientos de salud que provocan los muebles que son poco o nada funcionales y lo único que hacen es dar una imagen estética.
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